ANTIGUA Y NUEVA ALIANZA

ORIGEN DEL PUEBLO DE ISRAEL: ANTIGUA Y NUEVA ALIANZA.

LOS DIEZ MANDAMIENTOS.

-          La Antigua Alianza.

            Hace mucho tiempo, de una familia que vivía en Ur, nació un chico llamado Abram. A lo largo de su vida fue creciendo en hombre y en fe, hasta que un día Dios llamó a Abram y le dijo que se pusiera en camino hacia una nueva tierra, con su mujer y su ganado; aquella tierra era Canaán, cerca de Egipto. Así pues, Abram hizo lo que Dios le dijo.

            Cuando llegaron allí, Abram (puso) construyó su casa y cultivó la tierra para comer y Dios volvió a hablarle a Abram y le dijo que todas esas tierras que veía a su alrededor, delante, detrás, a derecha y a izquierda serían para él. (Dios le daría todas esas tierras a Abram) y además le prometió que su descendencia sería muy grande.

            Varios días después, al ver Dios que Abram era bueno y justo y cree en Él, se le aparece en sueños y le propuso un trato:

            -Abram, yo soy tu Dios, anda en mi presencia y se perfecto. Yo hago en ti mi alianza (acuerdo): serás padre de una muchedumbre de pueblos. Ya no te llamarás Abram, sino Abraham, pues yo te he hecho padre de una muchedumbre de pueblos. Seré siempre tu Dios y daré a tu descendencia la tierra de Canaán, tú guarda mi alianza. Esta es mi alianza que guardaréis conmigo vosotros y vuestra descendencia. Saray, tu mujer, se llamará Sara y tendrá un hijo al que llamarás Isaac. Yo estableceré mi alianza con él y su descendencia.

            Después de esto pasaron muchos y muchos días, y Abraham y Sara tuvieron un hijo al que llamaron Isaac. Pero Dios quería saber si Abraham era todo lo bueno y justo que Dios pensaba  y si se merecía el premio que le prometió, y entonces le puso una prueba para comprobarlo.

            Dios le dijo a Abraham que matase a su único hijo, y Abraham se puso muy triste porque no sabía por qué Dios quería eso si era un Dios bueno. Entonces al otro día Abraham llevó a su hijo Isaac y un cordero a la montaña para matarlo y cuando Abraham está a punto de matar a Isaac, bajó un ángel y le dijo que no lo hiciera, que era una prueba que Dios le había puesto para ver su era obediente, y pasaron muchos días.

            Abraham se hizo viejo y cuando Isaac se hizo hombre le dio todo lo suyo y murió. Ya antes había muerto Sara, su mujer. Así que Isaac se casó con una muchacha llamada Rebeca y tuvieron dos hijos: Esaú, el mayor, y Jacob.

            El heredero de la promesa que Dios hizo a Abraham era Esaú, pero éste hizo un trato con Jacob, de manera que el mayor sería él y Esaú fuera el pequeño, y todo lo de Esaú sería para él.

            Jacob quiere decir Israel y el pueblo de Israel tiene este nombre porque desciende de Jacob o Israel.

            Cuando Esaú vio que Jacob le había engañado, Jacob huyó a casa de su tía.

-  Origen del Pueblo de Israel.

            Allí Jacob se casó con dos primas suyas, Lía y Raquel, de las que tuvo doce hijos: Rubén, Simeón, Leví, Judá, Dan, Neftalí, Gad, Aser, Isacar, Zabulón, José y Benjamín. Ellos dieron lugar a las doce tribus de Israel (Jacob).

            Pero el preferido de Jacob era José y los demás le tenían envidia, y por eso un día lo metieron en un pozo y dijeron que había muerto, pero por allí pasaron unos mercaderes y vieron a José y lo cogieron para venderlo en Egipto como esclavo.

            Pasaron muchos años, y los hijos de Jacob se hicieron grandes y tuvieron hijos, y José también, además consiguió un trabajo importante.

            Un día los hermanos de José fueron a Egipto a comprar trigo para comer, y se encontraron con José y le dieron mucha alegría porque se arrepintieron de lo que hicieron con él y se fueron a vivir a Egipto con José todos con su padre, Jacob. Pasado un tiempo, todo el pueblo de Israel que vivía allí, el Faraón los esclavizó.

- La Nueva Alianza.

            Por miedo a que los israelitas fueran más numerosos que los egipcios, el faraón mandaba matar a todos los niños varones israelitas según nacían, pero algunos escapaban.

            Uno de estos niños fue arrogado al río Nilo en una cesta que flotaba. Se llamaba Moisés. Una hija del faraón lo vio mientras se bañaba en el río, y tanto le gustó que mando llevarlo al palacio para cuidarlo. Cuando se hizo mayor mató a un egipcio que maltrataba a un israelita y tuvo que huir y hacerse pastor.

            Un día Dios se le apareció en una zarza ardiendo y lo escogió para liberar al pueblo de Israel de la esclavitud del faraón. Como el faraón no hacía caso, el Señor mandó a Egipto diez plagas, y después de las últimas, asustado el faraón dejó libre al pueblo de Israel guiado por Moisés.

            Después de unos días, pasaron al pie del Monte Sinaí. Moisés subió solo al monte para encontrarse con Dios.

            Y allí en el Sinaí, Moisés y el Pueblo de Israel hicieron una Nueva Alianza con Dios. Dios le entregó a Moisés  las tablas de los Diez Mandamientos.

            Esta Nueva Alianza consistía en que el pueblo de Israel debía cumplir los diez mandamientos que Dios le había dado y Él les daría una tierra muy especial y fértil, para que vivieran  “la Tierra Prometida”.

- Los Diez Mandamientos.

            1.- Amarás a Dios sobre todas las cosas.

            2.- No tomarás el nombre de Dios en vano.

            3.- Santificarás las fiestas.

            4.- Honrarás a tu padre y a tu madre.

            5.- No matarás.

            6.- No cometerás actos impuros.

            7.- No robarás.

            8.- No dirás falso testimonio, ni mentirás.

            9.- No consentirás pensamientos ni deseos impuros.

          10.- No codiciarás los bienes ajenos.